Una pieza que irradia poder y estabilidad. Este collar de hombre presenta un dije rectangular de ónix negro con ocho puntas, un diseño geométrico que potencia la energía protectora y fortalecedora de esta piedra ancestral. El ónix negro es reconocido por su capacidad para absorber energías negativas, aportar firmeza en tiempos de incertidumbre y ayudar a mantener los pies bien anclados a la tierra. Llevar esta joya es un llamado a la resiliencia interior, al equilibrio emocional y a la conexión profunda con la propia fuerza vital.
Un amuleto esencial para quienes buscan estabilidad y poder en cada paso.
